14 agosto 2006






Me encontré recorriendo tantos espacios simultaneamente, dividí palabras en fonemas indescifrables, veinte veces por minuto, veinte meses, sin cantidades meramente exactas, destapando el secreto de las rocas si me atrevía a descorrer el velo de lo palpado conocido. Me desencontré difusa en el mar oscuro de la noche, fundida en la mirada lúnatica y extravagante del universo, lloviendo impresiones escritas desde siempre, modulando pasos, me encuentro modulando la velocidad del gotereo incesante, divertida entre el olor del tronco más húmedo, más parlanchin, despeinado con sus hojas vitales, sobre sus raíces divertida la idea de ser encontrada, hacia esa copa lejana voy desencontrando las carreteras, hasta esas ramas voy, para seguir alargando la vida...